Pues sí, a pesar de pandemia, confinamientos y demás, en COS&R no paramos en nuestro empeño de poner nuestro granito de arena para alimentar la escena musical gaditana. Y hoy traemos un plato que esperemos saborear en cuanto los escenarios empiecen a funcionar. Whip Shock y su crudo rocanrol encienden el escenario, pero hasta que eso ocurra, Ale, Diego y Juanka nos dejan esta entrevista, la cual podéis leer mientras escucháis esta gran banda!
Sois uno de los grupos más cañeros de Cádiz, haciendo puro rock en los tiempos que corren, donde en España prima el reguetón, indie etc. ¿cuándo y cómo empieza la aventura de Whip Shock?
El grupo empieza en verano de 2016 a raíz de una broma entre Diego (vocalista y guitarrista) y Juanka (baterista y electrónica) en un festival de música al que asistían. En una conversación bastante banal Diego le dijo a Juanka “Tío… ¿y si hacemos un grupo tú y yo, así a lo White Stripes…?”. Los dos se rieron y no se lo tomaron en serio, pero la misma noche a las 3 de la madrugada Diego le escribió a Juanka: “Oye, ¿y si lo hacemos de verdad?”. Al poco y antes del primer ensayo se unió Ale (bajista y corista) y empezamos a ensayar en un centro joven de nuestra ciudad, no teníamos ni para un local, así que hacíamos lo que podíamos. Pero empezamos bastante a tope. Realmente el grupo nace como tal en 2017, cuando ya teníamos un repertorio de canciones propias con el que dar algún que otro concierto. En cuanto lo tuvimos nos lanzamos a los escenarios directamente.
Y no es la primera vez que del publico de un concierto sale un gran grupo. ¿Por qué Whip Shock?
Es gracioso, porque el nombre no significa nada en concreto y hoy en día no tiene nada que ver con el grupo. Estábamos haciendo una lluvia de ideas porque necesitábamos un nombre para apuntarnos en el centro joven al que íbamos a ir a ensayar. Nos planteamos en un momento determinado la música que queríamos hacer, Blues, y pensamos en cosas relacionadas; la era de la esclavitud, el golpe del látigo… Pero con un poco de electricidad, para darle caña. De ahí salió “Whip Shock”. Que luego hemos acabado haciendo de todo menos Blues, pero bueno…
Hay que ser flexibles, jajajaja…Lo cierto es que a nivel mundial hay un elenco de grupos rockeros de “estos tiempos” más que venerables, como Greta Van Fleet, Wolfmother, King Gizzard & The Lizzard Wizard, Ty Segall etc. que no tienen tanto reflejo por aquí ¿Cómo veis el ambiente rock en la provincia?
De esos y de muchos otros grupos más raros/menos mainstream hay fans en la provincia hasta debajo de las piedras. El problema es ese… que están debajo de las piedras. Mientras que en Cádiz nosotros y otros grupos alternativos hemos tenido muy buena acogida, la mayoría de la escena se mueve en torno al rock clásico, flamenco y carnaval.
Si tienes un estilo que se sale de la norma, organizas un concierto (cuando se podía) en condiciones y lo promocionas muy bien, se va a presentar más gente de la que te imaginas. Pero entre la escasez de salas de calidad, la reluctancia de algunas a dar oportunidades a grupos que no les aseguran un taquillazo y, en algunos casos, el precio del alquiler… Muchas bandas acaban sin salir a la superficie porque cuesta sangre y sudor, y por eso la escena lleva un tiempo estancada.
Pues a ver si la despertamos entre todos, que no solo de carnaval vive el gaditano! En vuestra música se ven claras influencias del grunge, metal etc. ¿tenéis alguna banda que os influya especialmente? ¿y algún grupo nacional que os motive?
Realmente no nos dejamos guiar por nadie. Cada uno escucha mucha música diferente a la del otro, desde Arctic Monkeys a Tool, Camarón o música clásica. Tenemos muchísimas influencias comunes y aunque sí es verdad que Diego es muy nirvanero, nos estamos desmarcando cada vez más del grunge para nuestro nuevo trabajo. Queremos hacer lo que nos dé la gana y sonar a Whip Shock y Whip Shock suena a muchas cosas diferentes. No nos ponemos un límite estilístico y menos desde que sacamos el último single. Sin complejos, hacemos lo que queremos porque queremos y nos gusta a nosotros.
Sí es verdad que tenemos ciertas bandas comunes, pero son muy heterogéneas. Podríamos decir que ahora mismo nuestra principal influencia es Biffy Clyro, pero compartimos Nirvana, Death From Above, Royal Blood, Polyphia, Bring Me The Horizon, Don Broco y muchas otras.
A nivel nacional nos flipan grupos con los que hemos tenido la suerte de tocar como Smokers Die Young o 51 Grados, que son de lejos el mejor directo que hemos escuchado. En Andalucía hay mucho nivel y en Cádiz también, por mencionarte Surya, Clear Lines, Put-Off, Subterra… la lista de grupos nacionales se nos quedaría corta.
…Y VUESTROS TEMAS
Hablando ya de vuestra música: un primer disco bastante interesante con un sonido muy potente, Moving Fast. ¿Qué tal ha funcionado?
Sorprendentemente bien. Empezando por el crowdfunding, que lo era y a la vez no. Lo teníamos más que pagado a partir del dinero de los conciertos y nos sabía muy mal decirle a la gente “Pagadnos la producción del disco, porfa” sin dar nada a cambio, así que fue una especie de colchón en el que siempre hubo una recompensa para quien colaborase. Pero la gente nos apoyó por encima de nuestras expectativas, antes y después de la salida.
En el año en que hemos llevado el disco por bandera hemos dado cerca de 13 conciertos, todos con muy buen recibimiento por todo Cádiz, además de Málaga y Madrid.
Y ya a final del año pasado sacasteis nuevo single, The Rise & The Fall. Con tanto confinamiento ¿habéis tenido tiempo de trabajar en nuevo material? ¿para cuando el siguiente LP?
Vamos a hacer música siempre que podamos y hasta que el cuerpo aguante, y el ritmo en lo que a creatividad se refiere no se ha visto tan afectado como creíamos. El único problema han sido los ensayos, ya que Juanka ha estado confinado gran parte del tiempo en otro municipio y no nos hemos podido reunir tanto. Pero todos tenemos conocimientos y herramientas para poder componer y trabajar a distancia y no nos ha costado adaptarnos a la situación. Seguimos terminando temas casi al mismo ritmo que antes.
En cuanto al siguiente LP… Es complicado. Somos un grupo que merece más la pena escuchar y ver en directo, es un espectáculo mucho más completo y catártico. Darle a la gente una lista de canciones que escuchar de corrido hasta que se harten y esperar una eternidad hasta la siguiente no es lo ideal en esta situación. El formato single funciona de maravilla y sirve para mantener un flujo estable de material nuevo, poniéndole a la gente los dientes largos y dejándoles con ganas de más. No es que no vayamos a sacar otro disco, pero al igual que el anterior, preferimos llevarlo por bandera, en persona, a todos los sitios en los que podamos reventar el techo. Hasta que podamos hacer eso, no tenemos previsto el lanzamiento de un LP.
¿Y quien es la mente compositora?
Mentalidad de colmena, pero sin reina. Suele ser Diego el que trae un riff o una idea y dice “Seguidme”, y así ha salido más de una canción en cuestión de 5/10 minutos (con su largo proceso de pulido hasta tener un producto con el que estemos 100% contentos, que no somos magos), y lo mismo ha sucedido con ideas de Ale o Juanka. Pero ahí está la cosa, empezamos jammeando y así seguimos a día de hoy, con una química de la que no podemos estar más agradecidos. Si uno toca algo, los otros inmediatamente piensan en sus partes respectivas y combinan a la perfección casi siempre. Sí que es verdad que la química sale mejor en persona que a distancia, pero también funciona muy bien a la hora de trabajar sobre una idea que otro haya grabado en su ordenador.
También es por el mantra que tenemos desde el principio: “Nadie es más importante que nadie”. Si bien es cierto que voz y guitarra son elementos más protagonistas por defecto, nos esforzamos para que cada miembro represente un 33% de la canción. Todos tenemos muy buenas ideas (palmadita en la espalda) pero somos humildes y objetivos si tenemos que cambiar un elemento para que encaje con otro, siempre teniendo en mente “¿Cómo va a sonar mejor la canción?”.
La letra viene después, y se la adjudica el que primero se vea inspirado por la canción (por lo general Diego y Juanka) para escribir sobre cualquier tema. Una vez se tenga el esqueleto de la letra, se pone sobre la mesa y se dan opiniones, opciones y correcciones hasta que todos estamos contentos con el resultado.
Esta para Diego ¿Cuál es tu combinación guitarra-ampli favorita?
Excepto por las Firebird o las Sg, es muy improbable que me veas alguna vez con una guitarra Gibson y menos con una Les Paul. Me gustan muchas marcas raras de guitarras, pero muchas son boutique y tienen precios inalcanzables, así que me quedo con mis tres Fenders, que me encantan. Tengo una Jazzmaster, una Telecaster y una Stratocaster y aunque todas me gustan, desde que me compré la Strato hace un año que no toco otra, me ha cambiado totalmente la perspectiva. Creo que la que mejor suena objetivamente es la Telecaster, pero el rollo y la versatilidad de la Strato me ha flipado. Aunque mi corazón siempre pertenecerá a mi Jazzmaster blanca.
Últimamente he cambiado algo de idea para los amplis. Siempre he sido un gurú de los pedales de efectos y fan exclusivo de Fender. Me sabía prácticamente el mercado de segunda mano de memoria y no me veías sin un Big Muff en la pedalera. Casi que me importaba más tener una paleta de pedales super estudiada que un ampli concreto, pues lo usaba más para “plataforma de pedales”. Por eso, mi ampli soñado era un Deluxe Reverb, que es perfecto para enchufarle el pedal que quieras, pero cuando fui a probar unos cuantos amplis diferentes y comparé varios, me quedé con el que tengo ahora. Toco un Vox AC15 Handwired y he encontrado mi sonido. Para mí ese ampli lo tiene todo: limpios bonitos y un crunch que me flipa. Enchufo la Strato, pongo el overdrive al tope y tengo el sonido que quiero de lejos. De lo bien que sonaba acabé vendiendo todos los fuzzes que tenía. Solo me queda el Big Muff USA con el que empecé y un Big Muff ruso personalizado que encargué hacer con diseños de “Moving Fast” como recuerdo. Es verdad que no es el ampli más versátil, pero tampoco lo son otras marcas que me gustan menos y el sonido de Fender cada vez me está pareciendo más aburrido; me gusta un ampli loco como el mío, pero a la vez con mucha dinámica. No soy muy fan de Orange y Marshall, aunque de estos últimos me gustan mucho los modelos antiguos. También me mola el rollo Kemper y el modelaje, pero sobre todo que sea un ampli de pocos watts, para sacarle bien el sonido a las válvulas.
Así que, en conclusión, ahora mismo con mi Strato y el AC15 tengo la combinación que más me ha molado en años.
¡Tenemos muchas ganas de veros en directo y ese sonido Strato-AC15…, así que a ver si volveis al Milwaukee pronto!¿Habéis empezado ya a dar algún bolo o sigue la cosa parada? ¿Cómo definiríais un concierto de Whip Shock?
Diego dio un concierto acústico en streaming como parte de un “festival” al principio de la pandemia, y nos estamos planteando opciones para quizás poder retransmitir/publicar ensayos o playthroughs de los miembros de la banda, siempre y cuando creamos que sea una experiencia de calidad y que a la gente le pueda interesar. Pero donde brillamos de verdad es en un escenario, con un puñado de gente delante saltando y dándose codazos en un pogo. Hasta que podamos hacer eso, estamos parados.
Es difícil definir un concierto nuestro ya que todos son únicos y especiales. Distintas setlists que alteren el ritmo de la noche, samples nuevos que creen una nueva atmósfera, bajarnos a tocar entre el público en una u otra parte… Pero en resumen intentamos que sea como ya hemos dicho: catártico. Que tanto nosotros como el público acabemos cansados, sudorosos y con alguna que otra herida leve, pero con una sonrisa de auténtica satisfacción en la cara.
¿Julio Iglesias o Reggaeton?
Juanka – ¿La pizza con anchoas o con piña?
Para gustos, culos. Pero sí que hemos metido Reggaeton a algún que otro tema (siempre con distorsión y gritos de por medio, “Reggaepunk” lo llamamos). Con Julio Iglesias es más improbable que hagamos eso.
Ale – Pues depende del día, pero por lo general reggaeton. Bien es cierto que no me gusta todo el reggaeton que se ha hecho, pero ciertas canciones de Bad Bunny o de reggaeton antiguo del bueno sí que me molan. Sin embargo, gente como Anuel AA o El Alfa no los trago ni a tiro de escopeta.
Diego – Reggaeton sin dudarlo y si es nuestro “reggaepunk”, en vena, por favor. El reggaetón es un género muy estigmatizado que tiene muchas cosas buenas por decir aún y que conecta con las nuevas formas de consumo musical. Julio Iglesias es un pureta bastante machista y asqueroso, mientras que en el reggaeton cada vez hay más representación femenina, LGTB y en general, diversidad. Y además suena mejor, porque a nivel de las producciones, hay gente muy buena currando ahí.
¿Alguno hace surf o skate?
Diego – Yo hacía skate de chico, pero por poco no me parto la muñeca y lo dejé.
Juanka – Yo hacía patinaje en línea y me partí la muñeca sin el “por poco”. Tengo un longboard para desplazarme (con el que también me he reventado el codo) y de vez en cuando tonteo con el surf, pero jamás he conseguido levantar las ruedas de un skate del suelo.
Ale – Practicaba skate hace muchos años al igual que Diego y por una cosa o por otra lo dejé, no se me daba muy bien hacer trucos.
- ¿Y ahora decirle lo que os salga de los huevos a quien os dé la gana o callar para siempre?
Poneos la mascarilla, lavaos las manos y no salgáis mucho de casa. Si os ingresan y no os dan el alta, no queméis un colchón del hospital, por lo que más queráis. Aprovechad ahora que tenéis tiempo para aprender a tocar un instrumento, que mola mucho. Escuchad “The Rise & The Fall” hasta que se os rompan los auriculares y bebed mucha agua. No vemos el día en el que podamos mostraros todo lo que estamos preparando. Estamos cocinando lo mejor que hemos hecho en nuestras vidas como músicos.
Ah, y habéis perdido The Game.
Un beso y coged por la sombra.
Muchas gracias Juanka, Ale, Diego. Esperamos veros pronto reventando escenarios. S&R forever!